Lima afronta dura contrarreloj para construir sedes de los Panamericanos 2019
Perú presenta atrasos en la construcción de las sedes para las diferentes disciplinas deportivas.
A poco más de dos años para la inauguración de los Juegos Panamericanos de Lima 2019, aún continúan sin iniciarse las obras en las sedes que acogerán las competencias y, pese a que el comité organizador mantiene el optimismo en tener todo listo para la fecha de apertura, los plazos se agotan rápidamente.
En los 808 días que faltan para la ceremonia de inauguración, las autoridades peruanas deben construir una villa con 1.200 viviendas, un complejo deportivo, un polideportivo, un canal de remo y un centro de surf, además de remodelar estadios, pabellones y otras instalaciones.
Ninguna de esas obras ha sido todavía licitada en los tres años y medio que pasaron desde que Lima fue escogida en 2013 como sede de los Panamericanos, un período en el que hubo hasta tres comités organizadores distintos y una ley que transfería su gestión del Ministerio de Educación al de Transportes.
Toda esa demora en ejecutar lo planeado suscitó la preocupación de la Organización Deportiva Panamericana (Odepa), admitió recientemente el actual presidente del Comité Organizador de los Juegos Panamericanos de Lima (Copal), Carlos Neuhaus.
"Obviamente hay preocupación. Hay alerta por todas estas cosas. (...) Son juegos tan complejos que es difícil. Por eso tengo un equipo de trabajo de más de 100 personas", comentó Neuhaus, quien la pasada semana recibió la visita del flamante presidente de la Odepa, el chileno Neven Ilic.
En opinión del contralor de la República, Edgar Alarcón, al Gobierno se le agota el plazo para iniciar todas las obras y poder tenerlas listas a tiempo, según un informe presentado en abril.
Sin embargo, Neuhaus se escuda en que "más del 60 % de las sedes ya están construidas", y el 40 % restante se han diseñado nuevamente para hacerlas más austeras, de manera que todas las obras puedan comenzar antes de septiembre y terminar antes de la inauguración.
Por ejemplo, la Villa Panamericana, que se construirá en una gran explanada de Villa El Salvador, en el sur de la ciudad, se proyectó inicialmente con 39 torres de diez alturas y viviendas de 95 metros cuadrados, pero ahora tendrá siete edificios de veinte pisos, cada uno con ocho apartamentos de entre 68 y 75 metros cuadrados.
En ese lugar lo único que hay hoy en día es maquinaria del Ejército, al que ordenaron nivelar el terreno mientras se adjudica la obra.
En otro gran solar del municipio de Villa María del Triunfo no hay movimiento alguno para construir el complejo deportivo que albergará hockey, pelota vasca, rugby 7, sóftbol, tiro con arco y waterpolo.
El Estadio Nacional, con capacidad para 50.000 espectadores, solo se utilizará para la inauguración, la clausura y para algunos partidos de fútbol, pero no acogerá el atletismo porque le falta una calle a su pista desde que fue remodelado en 2011.
Los atletas estarán en un estadio de la Villa Deportiva Nacional (Videna) con aforo de 5.000 espectadores, al que se le añadirán 10.000 butacas supletorias.
"En la Videna ya tenemos cuatro polideportivos, así como una pista atlética que se debe cambiar, y faltaría poner techo al velódromo, además de hacer el estadio acuático, pero estamos con el tiempo suficiente", dijo Neuhaus.
El Copal canceló ya la construcción de un pabellón de 240 millones de soles (unos 73 millones de dólares) para el voleibol, y lo derivó a la Villa Deportiva del Callao, donde también habrá boxeo, judo, lucha y béisbol y donde habrá que acometer importantes remodelaciones.
Para 2019 también se esperaba tener lista la Línea 2 del Metro de Lima, que movilizaría a los deportistas desde el aeropuerto, pero hasta ahora solo se perforaron poco más de dos kilómetros de los 35 del túnel, por lo que los participantes se movilizarán en 317 autobuses, 732 automóviles y 72 furgonetas.
El hecho de que Santiago de Chile se haya asegurado los Juegos Panamericanos de 2023 al ser candidata única tras la retirada de Buenos Aires es una dosis de tranquilidad para Lima, pues en años pasados se especuló con que el país vecino se llevara los Juegos de 2019 si Perú no cumplía con sus compromisos.
EFE